La Plaza Teresa de Bolívar se despedirá este viernes 13 de julio de la palmera canaria que durante más de un siglo le ha acompañado.
Por motivos de seguridad, el ejemplar tendrá que ser retirado debido a su deterioro en el tronco, con orificios que se han ido agrandando con el tiempo, y la peligrosidad que supone para los usuarios de la Plaza y viviendas del entorno, según ha constatado recientemente un informe emitido por un equipo técnico de la Viceconsejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias.
La eliminación de la palmera se iniciará mañana viernes sobre las 8 de la mañana por parte de una empresa especializada y siguiendo un protocolo de actuación y seguridad. Se prevé que la actuación se realice en unas 5 horas; afectará al cierre de la Calle del Pino, y al desalojo de cuatro establecimientos y una vivienda de la zona. La Policía Local de Teror velará por la seguridad en el transcurso de la acción teniendo en cuenta el plan elaborado por la Oficina Técnica Municipal y la empresa encargada de la retirada de la palmera.
El centenario ejemplar de la especie Phoenix canariensis fue reforzado por el Ayuntamiento de Teror hace unos años con una estructura metálica para prevenir que se pudiera partir y al mismo tiempo evitar su tala, pero los informes técnicos han recomendado la eliminación inmediata del árbol “ya que en condiciones meteorológicas adversas corre el riesgo de caída, pudiendo ocasionar graves daños a los viandantes y viviendas colindantes”.
La palmera, de unos 20 metros de altura, es uno de las más antiguas que se conservan en el Casco de Teror, y es un verdadero icono visual para los muchos turistas que visitan la Plaza Teresa de Bolívar. El Ayuntamiento de Teror tiene previsto reponer en la zona el vacío de la vieja palmera por un nuevo ejemplar.
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